La 'zombificación' mundial llega al tierno mundo de los niños gracias a la película de animación 'Papá, soy una zombi'. Recién nominada a los Goya, la cinta se suma a la ola gótico-siniestra que arrasa entre adolescentes con las novelas y muñecas 'Monster High'.
Más allá de semejanzas, "el primer guión es del año 2000", subraya Ricardo Ramón, uno de sus directores, y nació con la intención de "hacer una película de miedo aun sin serlo".
Protagonizada por Dixie, una niña rebelde que, en su escapada de casa, acaba convertida en una muerta viviente, la historia se atreve a romper un tabú, y no es el del canibalismo: "Aunque sea infantil (está calificada para mayores de 7 años), nadie se había atrevido a hablar a los niños de la muerte, de zombis".
A la espera del Goya, 'Papá, soy una zombi', que se estrena el 10 de febrero, ya ha obtenido su primer premio. Fue en el Festival de Gijón y gracias a la votación de su público, los niños. "Creo que lo que más les atrae es sentirse un poco como adultos, saber que les estás tratando como mayores", valora el director, padre de dos pequeños de 7 y 11 años y "fans incondicionales" de su trabajo.
Todavía no hay muñecas de Dixie a la venta (como sí existe de la 'monster high' Ghoulia Yelps), pero ya está en marcha la edición de sus historias en papel y el proyecto de una segunda parte. Al fin y al cabo, pese a la palidez y las ojeras, una zombi vive... eternamente.
eso que es una pelicula !!!!!???????
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